Ciclo Memoria y modelos alternativos.

El viernes 30 de marzo tuvo lugar la segunda actividad que ApV y Cincómonos Espai d’Art organizaron dentro del ciclo Memoria y modelos alternativos. Esa noche el grupo de teatro de Cincómonos presentó la obra de teatro El torturador arrepentido. La actividad fue un éxito, o al menos eso declaraban convencidos y satisfechos los asistentes a la salida. Un éxito porque la obra es una muy buena pieza que promueve la reflexión; un éxito, sobre todo, porque los actores estuvieron impecables, impactantes, con unas actuaciones artesanales  tan cuidadas que a muchos nos costó comprender que se trataba de una ficción, y agradecimos el saludo que nos trajo de vuelta a la realidad.
Pero, ¿a qué realidad volvimos? La obra narra la historia de Julio, un secuestrado durante la dictadura militar argentina que luego de muchos años se encuentra con el Lobo, su torturador. Hilvanada con numerosos recuerdos, la obra plantea la posibilidad de la venganza ante la impunidad y el horror, pero nos plantea un nuevo horror, ¿cómo vengarse?, ¿es necesaria la venganza?
Luego de la obra, entre felicitaciones y comentarios, la gran mayoría de nosotros volvimos a la realidad de intentar mantener la historia viva, una historia que nos constituye como personas hoy, que nos identifica como comunidad, como grupo, como amigos, como familia. Sin esa historia, o mejor dicho, sin la conciencia de que es parte constitutiva de nuestro presente, no seríamos capaces de construir nada sólido para nuestra actualidad.
Por otro lado, el evento fue un éxito porque ¡logramos un aforo completo! Sabemos el peligro que conlleva medir el éxito a partir de una lógica cuantitativa. Un peligro si el número se vacía de significado y es un objetivo por sí mismo. Pero creemos que es necesario que nos juntemos. Sí, que nos juntemos más, que hagamos actividades juntos, que esas actividades nos permitan seguir confiando en la necesidad de lo colectivo, en la fuerza que tiene la expresión artística cuando conecta con una función concreta; la de mantener viva la memoria, la de juntarnos, sumar, seguir creyendo y estar unidos. Un día después de la huelga del 29M, sentimos que aún se puede confiar en que la unión hace la fuerza.
Gracias a los artesanos del teatro por la obra que nos brindaron.
Gracias compañeros y compañeras, amigos y amigas por venir.

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